El primer mes de embarazo es el mes que menos se nota porque hasta que no haya un retraso en la menstruación no se puede confirmar la sospecha de embarazo, aunque algunas mujeres presentan un ligero sangrado en el momento de la implantación. Si su ciclo menstrual es regular, este es el síntoma más evidente. Por lo general, comienzas a sospechar que estás embarazada cuando tu período se retrasa o no llega. Cuando queda embarazada, los niveles hormonales aumentan drásticamente.
Como resultado, es posible que esté más sensible de lo habitual. También es habitual que experimentes diversas emociones, como ansiedad o excitación, al enterarte de que vas a tener un bebé. Hable con sus seres queridos sobre sus sentimientos y consulte a su médico si está preocupado. Algunas madres experimentan cólicos uterinos leves en los primeros días o semanas de embarazo.
Son similares a los cólicos menstruales, por lo que no es de extrañar que los confundas con tu período. Si los cólicos son dolorosos o molestos, consulta a tu médico para que te aconseje cómo reducir el dolor. Es posible que sientas hinchazón o que la ropa te apriete un poco más de lo normal al principio del embarazo, pero es probable que todavía no tengas barriga en este momento. Es posible que sientas que tus senos están más sensibles o incluso adoloridos, pero este síntoma puede desaparecer una vez que el cuerpo se acostumbre a los cambios hormonales que experimentas.
El embarazo se divide en 3 trimestres. Cada trimestre dura un poco más de 13 semanas. El primer mes marca el inicio del primer trimestre. Todo comienza en la trompa de Falopio, donde tiene lugar la fertilización, es decir, la unión de los gametos femeninos y masculinos o las células reproductoras.
Así comienza la llamada fase preembrionaria (o fase germinal), que dura las 2 primeras semanas de embarazo. Si tienes alguno de estos síntomas y quieres confirmar que estás embarazada, la forma más rápida y sencilla de confirmarlo es hacerte una prueba de embarazo en orina. Después de 10 días de fertilización, puede dar positivo. Sin embargo, se recomienda que espere hasta que tenga su primer trastorno menstrual. Si el resultado es negativo en esta etapa, tenga en cuenta que puede ser un resultado falso negativo, ya que aún podría ser demasiado pronto para detectar un embarazo con este tipo de prueba.
Espere unos días antes de hacerse la próxima prueba o un análisis de sangre. Durante todos estos eventos, las paredes del útero se engrosan para evitar el embarazo en caso de embarazo y provocar la implantación. Si este óvulo no es fecundado por un espermatozoide, este engrosamiento se expulsa 2 semanas después en forma de período menstrual. El tiempo pasa y el embrión ahora puede medir entre 0,36 y 1 milímetro.
Puede que te parezca muy pequeño, pero ¿y si te digo que algunos de sus órganos ya se están empezando a formar? A partir de aquí, el embrión comienza a desarrollarse, al igual que las estructuras maternas que permiten este crecimiento, como la burbuja vitelina y los tejidos que posteriormente forman la placenta. Las hormonas del embarazo que libera el cuerpo de la mujer ponen en marcha un complejo mecanismo que se encarga de proporcionar al embrión todo lo que necesita para que pueda desarrollarse en el útero.